No solo le digamos a las niñas que pueden hacer lo que quieran – Enseñémosles como pueden romper barreras

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Crecí en un hogar donde me decían que podía llegar a ser y hacer lo que quisiera. Ahora, como una joven profesionista en el sector del desarrollo internacional, me doy cuenta de que este mensaje no siempre es suficiente. No me malinterpreten, las niñas pueden y deben ser y hacer lo que quieran. Pero independientemente de cuán verdadero, bueno, e inspirador sea este mensaje, se está quedando corto. Por ejemplo, todavía vemos muy pocas mujeres jóvenes persiguiendo carreras en sectores tradicionalmente dominados por hombres, como el de las tecnologías de la información y la comunicación (TIC).

Si bien no hay una solución fácil, las mentorías y los modelos a seguir, pueden tener un impacto real.

Tomaría mucho tiempo reflexionar en todas las razones que impiden que las mujeres y las niñas se aventuren en sectores como las TIC, pero estudios nos muestran que muchas de ellas están definidas y limitadas por la creencia de que las mujeres simplemente no somos “tan adecuadas" para el trabajo técnico o científico como lo son los hombres. Si queremos que las niñas liberen todo su potencial, para superar la brecha de género STEM y otros obstáculos, necesitamos más que palabras. Si bien no hay una solución fácil, las mentorías y los modelos a seguir, pueden tener un impacto real. Oportunidades de mentoría, donde las mujeres jóvenes son conectadas con fuertes modelos y mentores femeninos que trabajan en sectores no tradicionales—pueden ayudar a las niñas y mujeres jóvenes a liberarse de los estereotipos, las expectativas y las percepciones erróneas, tales como la popular creencia de que las mujeres no son tan adecuadas para un trabajo en particular como lo son sus contrapartes masculinas.

Es por eso que la IYF ha incluido un componente de mentoría en su nueva iniciativa Conectadas, donde trabajamos para aumentar la representación femenina en el sector de las TIC.

Es por eso que la IYF ha incluido un componente de mentoría en su nueva iniciativa Conectadas, donde trabajamos para aumentar la representación femenina en el sector de las TIC, brindando capacitación en habilidades técnicas, para la vida y para el trabajo, junto con apoyo integral, a 750 mujeres jóvenes de México. A través de sesiones semanales durante cinco semanas, las participantes de Conectadas desarrollan estrechas relaciones de mentor-aprendiz con mujeres en posiciones de liderazgo. Aunque las sesiones están estructuradas, y cada una tiene objetivos específicos, estas están planteadas para generar conversaciones orgánicas e incluso fomentar una relación que continue entre la mentora y la aprendiz.

Aquí hay tres razones por las que mis colegas y yo creemos que la mentoría es tan importante.

La mentoría refuta y rompe estereotipos dañinos

Más que escuchar las palabras “tú puedes hacer cualquier cosa”, el ver e interactuar con modelos a seguir femeninos, les muestra a las niñas lo que las mujeres pueden lograr en sectores como las TIC. Hace que la educación y las metas profesionales parezcan reales, alcanzables y deseables. Abre posibilidades de trabajo e industria, y naturalmente puede llevar a las niñas y mujeres jóvenes a reevaluar sus perspectivas sobre el "lugar" de una mujer en la sociedad. Incluso vemos un impacto positivo de los modelos a seguir femeninos en los hombres, ya que hay evidencia de que los niños que interactúan con educadoras STEM no creen que estas sean menos capaces o respetadas, sino que tienen una visión más equitativa de las niñas y las mujeres en STEM.

La mentoría genera resiliencia y fomenta una cultura de aprendizaje

Cuando las mujeres que trabajan -y prosperan- en sectores típicamente dominados por hombres comparten los desafíos profesionales que enfrentaron, cómo estos desafíos afectaron sus vidas y cómo los superaron, tienen el poder de modelar la resiliencia, de mostrar a sus aprendices que cometer errores y tener dificultades es inherente a cualquier trabajo o industria y, lo que es más importante, que esto no debería impedirles perseguir sus intereses y aptitudes. Además, a medida que las niñas escuchan acerca del proceso de aprendizaje y desarrollo profesional de su mentor, adquieren confianza en sus propias habilidades y en cómo estas se pueden mejorar con esfuerzo y perseverancia.

La mentoría abre un camino claro hacia las oportunidades profesionales

Incluso cuando las mujeres jóvenes llegan a conocer todas las increíbles oportunidades que les esperan en la industria de las TIC, con frecuencia carecen de la dirección y el apoyo que necesitan para dar el salto. A través de la mentoría, podemos brindar a nuestras participantes de Conectadas, orientación sobre cómo establecer objetivos profesionales y personales claros, hacer transiciones de carrera, identificar oportunidades, e incluso cómo asignar valor a su trabajo para que puedan buscar compensaciones justas y equitativas. Además de eso, las mentoras pueden mostrar a las mujeres jóvenes el valor real de la negociación y la creación de redes profesionales. Los mentores pueden ser un recurso invaluable para ayudar al aprendiz a encontrar, solicitar y asegurar un trabajo.

Equipemos a las mujeres jóvenes con las habilidades, los recursos y el apoyo que necesitan para avanzar en industrias tradicionalmente dominadas por hombres, como las TIC. 

Continuemos diciéndole a las niñas que pueden ser lo que quieran ser, pero asegurémonos de mostrarles cómo hacerlo. Equipemos a las mujeres jóvenes con las habilidades, los recursos y el apoyo que necesitan para avanzar en industrias tradicionalmente dominadas por hombres, como las TIC. El componente de mentoría de Conectadas no solo abre ventanas para que las niñas vean oportunidades del mundo real que no se les habían mostrado antes, sino que, lo que es más importante, abre la puerta para que puedan acceder a esas oportunidades con perspectiva, propósito y confianza.

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Ana Salinas es Coordinadora de Programa en la oficina de IYF en México.